Una pareja de ancianos casados ​​acababa de acomodarse en la cama.

Un matrimonio de ancianos acababa de acostarse cuando el anciano se tiró un pedo ruidoso y exclamó: “¡Siete puntos!”.

Su esposa, confundida, se dio la vuelta y preguntó: “¿Qué fue todo esto?”

El anciano sonrió y respondió: “Es fútbol de pedos”.

Para no quedarse afuera, unos minutos después la esposa soltó una canasta y orgullosamente anunció: “¡Touchdown, juego empatado!”

Tras una breve pausa, el anciano disparó otra y se jactó: “¡Ajá! ¡14 a 7! ¡Estoy ganando!”.

Decidida a seguir el ritmo, la esposa soltó otro gran grito, diciendo: “Touchdown, empate otra vez”.

Luego, con un pequeño chillido, añadió: “¡Gol de campo! Voy ganando, 17 a 14”.

Sintiendo la presión, el anciano no soportaba la idea de perder. Decidido a no ser derrotado, empujó con todas sus fuerzas, pero se esforzó demasiado. Para su horror, se defecó accidentalmente en la cama.

Su esposa, sorprendida, preguntó: “¿Qué diablos acaba de pasar?”

El anciano suspiró y dijo: “Medio tiempo, hora de cambiar de lado”.

¡¡JAJAJA!!

¡Espero que este chiste te haga sonreír! ¡Que tengas un buen día!

Hãy bình luận đầu tiên

Để lại một phản hồi

Thư điện tử của bạn sẽ không được hiện thị công khai.


*